Colinas Bastión: La Fortaleza

Vista aérea de la fortaleza

El emplazamiento de mayor población que se pueden encontrar en la zona del Reino Bajolasaguas, tiene su origen en La Colina; nombre por el que se conocía a una pequeña agrupación de granjas que se defendían mutuamente, desde una posición privilegiada en lo alto del cerro más alto, desde el que se divisaba el viejo camino del este y el Llanto de Yrsa. A estas granjas fueron añadiéndose poco a poco varios grupos de refugiados, rudos colonos, fugitivos de la civilización, antiguos bandidos y gentes de mal vivir en busca de una segunda oportunidad, lo que hizo crecer el enclave, que con el tiempo acabó formando una extraña mezcolanza de granjas y casas. Tras sobrevivir a incendios y ataques de los salvajes, hace casi cincuenta años se agruparon en una pequeña villa, rodeada por un muro de piedra y un foso, bajo la guía de Aicart, antiguo soldado de las tierras sureñas, y su grupo de aventureros. 

Aicart fue quien erigió el Bastión, una pequeña fortaleza en una colina vecina a la de la villa, diseñada por su compañero de aventuras, el enano Ogin Abaigar. Aicart buscaba que de esta forma las fuerzas atacantes debían dividirse para atacar la fortaleza o la villa, y parece que lo ha logrado, desde su construcción Colina Bastión ha repelido todos los ataques de salvajes que ha sufrido y han pasado más de diez años desde el último ataque.

Sus habitantes han erigido verracos de piedra demarcando el territorio y han construido varias atalayas en las colinas más altas desde las que controlan la zona circundante, y vigilan tanto el viejo camino del este como el río Llanto de Yrsa, por los que de vez en cuando viajan comerciantes y aventureros.

Colinas Bastión es lo más parecido a un refugio civilizado que se puede encontrar en estas latitudes.

 

SOBRE LA MAQUETA: 

Esta maqueta aprovecha unas cajas de embalaje de poliuretano cuyas formas ya parecían una fortaleza en si. Al ser de poliuretano expandido, podía romperse con facilidad, por lo que le dí una capa de cola blanca e incluso usé algunas vendas de yeso para manualidades. Así ganó consistencia, sobre todo en la torre, que era el elemento más endeble.

Después de pintarla con algo de textura, coloqué los listones de madera para darle realce. Son de un mantel de los chinos. Sale mucho más barato que comprar listones de modelismo y queda bien igual. ;)

Aún hay cosas que añadir y mejorar, pero ya va teniendo el aspecto que debiera. El portón tendrá unas cadenas para que pueda bajar, y añadiré un rastrillo, así las saeteras laterales podrán ganarse el calificativo de trampa mortal, al trabajar en consonancia con el techo enrejado que permite bañar a los asaltantes con salsa barbacoa y demás aceites calóricos. :D

Las miniaturas son de rohírrim del juego de miniaturas del señor de los anillos

La Torre tiene el frontal extraíble, lo que permite ver el interior. Las escaleras quedaían escamoteadas en la parte extraíble para facilitar el manejo de miniaturas. En la primera planta, a la altura de las murallas, se puede ver el suelo metálico por el que volcar aceite hirviendo y ácidos a los atacantes. En la segunda, hay una estancia para el castellano, con chimenea, mesa, trono y biblioteca del Ikea Heroquest.

Falta colocar estandartes, acabar los libros de la librería y otras decoraciones. Al menos, para que los inquilinos no se quejen, tienen ya disponible un barril de cerveza/vino.

El antiguo mago del Heroquest y varias figuras de plomo antíguas como invitados

La corriente de aire de una ventana abierta... mortal enemigo para el orden en la librería.

En el patio hay un pozo y la estatua de Aicart. También se podrían añadir unas pequeñas caballerizas, y más estandartes, que cuelgen desde las ventanas de la torre.

La estatua de Aicart contempla las entradas y salidas de su fortaleza.

En el tejado hay dos balistas, diseñadas por Ogin Abaigar, para acabar con la amenaza del Wyrm. Un peligroso enemigo al que lograron hacer huir largo tiempo atrás. Sin el enano para su mantenimiento... seguirán operativas?

listones, cadenitas, piezas raras de metal... voilá! una baista!

En el exterior, siempre hay sitio para varios puestos de mercaderes. La caseta del herreo está hecha con listones sobrantes del mantel todo a cien euro, y falta ponerle un toldo que haga de techo. Los tenderetes de carne y pescado son de decoraciones navideñas, también de los chinos.

pescado freeeesco, oigaaa!

En una próxima entrada hablaré de la villa, pero sin maqueta... no tengo material para tanta casa ;)