Saludos. En esta ocasión vamos a realizar una manualidad lúdica consistente en construir nuestras propias miniaturas y decorar así las partidas con peques. Aunque también servirán para mayores, claro.
El engrudo base es la silicona caliente, con la que cubrimos bien la bola que nos servirá de cuerpo. Ojo si utilizas la de porexpán blanco por que se puede derretir. Si usas una bola de papel de plata tendrás menos problemas. Los alambres para piernas los podemos clavar en el cuerpo y que nos sirvan de agarre a la hora de aplicar la silicona. Seca lo suficientemente rápido como para que no tengamos que hacer demasiados malabares.
Cuando tengamos la parte inferior del torso y las piernas de alambre bien cubiertas, podemos enganchar los alfileres (cortando el extremo metálico de la aguja que salga por detrás de la bola) y el pelo, cubriendo bien el cuerpo. Es mejor hacer dos pases con la silicona, uno para asegurarnos la fijación de los elementos y otro para alisar y dar la textura que nos parezca adecuada. En esta segunda pasada se pueden incluir detalles como cejas o bocas.
Tras tener la miniatura ya definida, nos hacemos con la base. Podéis usar casi cualquier cosa que sea lisa. Yo he utilizado un elemento barato de bazar sección cocina, los agitadores para cóctel que acaban en esa forma circular tan idónea. También suelo utilizar fichas de póker, pero para este caso eran demasiado grandes y gruesas. Aplicamos el engrudo para enganchar la mini a la base, a modo de suelo.
Para el pintado, utilizamos pintura acrílica. Si la pintura que utilizamos es de la más barata, suele ser muy líquida y le podemos dar un tanto más de consistencia añadiéndole cola blanca. O invirtiendo algo más de oro, usar las de botes de 80ml que venden marcas como Titan, Abacus y similares que tienen un mejor agarre.
A la manera del pintado de miniaturas, es buena idea aplicar una capa base. En este caso, como queremos que el acabado sea luminoso, tipo dibujos animados, la capa base será blanca. Una vez seca, pintamos las piernas y el pelo verde, y el cuerpo naranja vivo (lo he hecho mezclando rojo y amarillo por que no tenía pintura naranja). Tras una primera capa, podemos aclarar un tanto la mezcla con amarillo, para lograr un naranja y un verde más claro para resaltar algunas zonas levemente. Se aplica un punto de negro al centro del ojo y listo. Si queremos que tenga un acabado brillante, podemos aplicar una capa de barniz brillante, que además hará que la pintura quede bien fijada y salte mucho menos.
La base de la miniatura podemos mejorarla aplicándole una capa de arena, para ello la cubrimos de cola blanca y la dejamos toda la noche cubierta con arena. Deja que se seque bien, si puedes esperar todo un día mejor. La puedes pintar con una capa base marrón oscuro, otra capa marrón más claro y finalmente toques de pincel seco en verde.
Cambiando el esquema de color, puedes hacer tomates asesinos como los que salen en la aventura inicial del juego de rol Magissa, que inspiró la serie de aventuras que estamos jugando en casa desde principios de este año.
En juego, estas kaobazas se infiltrarán entre las comunes, pudiendo tomar por sorpresa a quien se aproxime a su terreno. Estoy trasteando con un sistema sencillo, que coge ideas de aquí y allá, para hacer que los problemas a enfrentar puedan ser retos físicos o mentales. En una próxima entrada seguirán las aventuras de este sandbox de inicio de año, con la esperanza de que prospere y tenga buena cosecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario